Cosas que aprendi
Cosas que aprendí. 5:00 AM. Mi madre con escrupulosidad militar dejaba escuchar su voz con tono suave pero firme: ¡Hijo! Levántate. Llamado que llegaba a mi de forma clara sin distorsión alguna, a veces lo escuchaba tan claro como un pensamiento, pero yo sin mover los labios y sin articular ningún movimiento respondía telepáticamente: “5 minutos mas por favor” Lo hacia de esta forma por que era un hecho que debía levantarme, ya que era uno de esos pocos casos en que mi madre era inexorable, esos 5 minutos mas que yo automáticamente pedía de forma ritual no eran mas que un reflejo de la condición de absoluta comodidad y seguridad que sentía en casa al lado de ella. Mi padre oficial de la Armada o Marino de guerra como el le gustaba decir, a esa hora estaba completamente listo, bañado, afeitado, peinado de forma prolija con un producto que le dejaba una luz brillante en el cabello, del cual no recuerdo el nombre, este le daba un aire de actor de cine, su uniforme blanco inmaculado c