Mi caballo ganador



Mi caballo ganador 



 El calor es asfixiante, el sudor lo recorre todo desde su coronilla desde lo más alto de su ser, recorre sus cabellos dorados todos y cada uno de ellos, agrupados, entrelazados con tiras de cuero en trenzas.


 Su pensamiento lo lleva a otras instancias ve que todo lo que anhela lo ve tan cerca, todo absolutamente todo está detrás de esos muros, por instantes saborea la inmortalidad, el amor.


 En sus manos de Guerrero reposa su yelmo o kraneos que con un movimiento suave lo coloca sobre su cabeza como si fuese una corona, aunque en esta oportunidad fuese una corona de espinas solo de espinas.


 Observa a su alrededor y contempla a sus compañeros de armas, observa también el miedo en sus ojos, siente el esfuerzo al respirar de cada uno de ellos, siente el miedo que se distingue del oxígeno, pues no falta, flota más allá de cada cuerpo, de cada alma.


 Cierra sus ojos, respira y el olor a madera húmeda, a salitre que lo coloca por instantes a manera de relámpago en sus tierras, Tesalia meridional.


 Príncipe, hijo y guerrero, así se define entre los suyos los Mirmidones que lo siguen ciegamente, su espada le ha dado gloria en cada victoria y en sus almas abrigan que esta vez no va a ser diferente.


 Él sin embargo, aunque no duda de la victoria saborea que su destino será diferente algo en su ser lo hace pensar que está vez obtendrá lo que más insiste en obtener, su perpetuidad.


 Es hora de empuñar las armas.


 En su mano izquierda su fiel Dory lanza que tiene más de un centenar de enemigos muertos en su haber, en la misma mano su escudo redondo o Aspis y en su mano derecha su amante de mil batallas, su poderosa espada la mortal y asesina Xiphos.


 No se siente cómodo del todo, él está acostumbrado a lidiar de otra forma con sus luchas con sus demonios, con sus problemas con su arte, pero también entiende que en la vida todo es cambio que las buenas ideas no se rechazan y menos en la guerra.


 Él se encuentra sin remedio en ese gran caballo de madera a las orillas de el Mar Egeo en las costas de Troya, hombro a hombro con sus hermanos esperando su momento, ansiando verse de frente con su destino, sintiendo la cercanía del amor, definitivamente preparado para la batalla.


 Así me defino a cada minuto con pensamiento y alma de Guerrero, es una constante en mi vida asumir y aceptar los retos impuestos por la divina providencia con todo mi ser y empuñando todas mis armas.


 Quizás y por alguna razón me piden que pare que no insista tanto, pero no puedo, si todo lo que anhelo esta detrás de esos muros.


 El vivir condicionado a la velocidad de los caballos más lentos no va en mí, mi deseo de avanzar, de crecer y aprender, va de la mano con mi pasión.


 Solo deseo ser consecuente con lo que pienso, con lo que trabajo con tanto esfuerzo y les confieso que es algo maravilloso de vivir.


 Bienvenida seas "feria internacional del libro de Miami 2021".


 Allí estaré, hombro a hombro con mis compañeros de armas, de letras, a las orillas de aquel mar en el Estado de la Florida, en los que sí son mis corceles de vida, quizás sea Bucéfalo venciendo las sombras o lo más seguro que sea en el de Troya prestó para la sorpresa y la victoria.


Por: Luis Gonzalo Guerrero.


 Autor de: "Un adiós en el malecón"


Gerente de zona del Grupo Editorial Jurado Ecuador JuradoEditorialEcuador@gmail.com JuradoEditorialEcuador@gmail.com juradopublishing@yahoo.com


 Luis Gonzalo Guerrero, no es Aquiles el inmortal, es un soñador, amante del mar, de sus pasiones y por mucho un hombre feliz.







Comentarios

Entradas más populares de este blog

Felicidad absoluta en tu día.

Las mareas y los vientos.

Hoy por tí celebro.