Charlotte, Aníbal y Yo





Charlotte, Aníbal y Yo.

 
Dentro de este mundo hostil, pero maravilloso que ha sido moldeado por la civilización posmoderna, nada ha de extrañarnos, nada nos toma por sorpresa; la comida se vende hecha y empaquetada, solo de calentar en hornos de microondas.

 Ahora existe, la inteligencia artificial, los amigos virtuales, las novias virtuales, todo tiene un precio, todo se compra, todo se vende.

 Charlotte es una mujer muy alta, de piernas hermosas, cintura pequeña, con cabellos largos que caen con gracia en su espalda, cuál cascada, negros, muy negros, generosos y brillantes.

 Ella luce zapatos de tacón alto, de 15 centímetros, de un rojo intenso, tan finos que al caminar por la vereda parece que lo hiciese sobre la punta de sus pies.

 Aunque, sin dudarlo, piensa y siente desesperada que vende amor, pero tristemente, nadie lo nota, nadie le compra.

 Es, cuando giro mi cabeza, enfoco mi mirada y del otro lado de la calle, está un niño, Aníbal, vendiendo periódicos, él es tan joven, lidiando con una actividad tan vieja, pregonando noticias que de seguro no entiende.

 Y realmente creo que es mejor así, pues, no se sentiría para nada bien, comprendiendo los indicadores macroeconómicos fatídicos que grita a viva voz, con tanta pasión. A pesar de esto vende todo, normalmente se va a casa sin ni siquiera un ejemplar de ese prestigioso diario.

 Yo por mi parte los observo detalladamente y los comprendo, sin embargo, no dejo de pensar en la determinación que existe en cada una de sus almas, en todos los pensamientos y sentimientos que los envuelven, imagino, cuáles son los titanes que los acompañan y fundamentan en cada uno de sus actos.

 Siempre estamos en una búsqueda, somos prácticamente buscadores profesionales y obsesionados, buscamos sin cesar alegrías, sentimientos, emociones, éxito y progreso.

“Los pensamientos son las sombras de nuestros sentimientos; siempre más oscuros, más vacíos y más simples”.

 De esta manera nos los explica el filósofo, poeta, músico y filólogo alemán del siglo XIX, Friedrich Nietzsche.

 Los pensamientos que logramos a diario, no pueden ver la luz por sí solos, no suelen ser comprendidos en su total magnitud, sino únicamente a través de nuestros sentimientos.

 Quizás, nadie note a Charlotte en esa vereda, no porque sea poco atractiva, sino que sus cavilaciones y aflicciones no van a un mismo ritmo y eso definitivamente no vende.

 Aníbal, en cambio, teniendo sus designios claros y sus emociones en línea, lo refleja armoniosamente en su voz que retumba en cada rincón de la calle y eso indiscutiblemente vende.

 Satisfecho en parte, dejo de observarlos y sigo mi camino, aunque distraído, paso tras paso me invaden diferentes ideas, acompañadas de múltiples reflexiones. Sin detener el paso, trato de alimentar mi mirada con lo cotidiano, con lo sincero de Guayaquil y llego a una única y absoluta conclusión.

 El Amor, la Alegría, el Éxito y el progreso, son esos grandes titanes que caminan junto a mí en este momento, ellos y no otros, sin duda alguna, son los pilares donde quiero que repose, lo que me quede de vida.

Por: Luis Gonzalo Guerrero.

JURADO GRUPO EDITORIAL.

Comentarios

  1. Sobrino cada vez que te leo me siento tan profundo en mis pensamientos
    Que tus pensamientos aclaran los mios
    Dios te siga bendiciendo

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  2. Bueno sobrino demás esta decirte, que la negación 🤱, la aflicción, es lo q nos refleja el alma y eso se refleja en nuestro exterior.. Venden el cuerpo, vender noticias, vender verduras, vender limones, lo q sea.. Se debe hacer desde la actitud de lo positivo.. Nadie debe saber el dolor, la aflicción que nos invade, por q no nos comprarían.. Lo q sea que se desee hacer, debemos ser optimistas, progresistas, alegres.. Y es lo q dices tu sobrino, si dejamos q los pensamientos vacíos invadan nuestra alma. Pues venderemos fracaso.. Yo parto de creer que como tu.. Voy agarrada de la mano de lo real, de lo positivo, del éxito, de la alegría.. Y lo mas real agradeciendo a Dios que mi voz y mi reflejo sea como la del pregónero.. Con sonido alto y sonoro.. Un abrazo..

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  3. excelente ! gracias tu siempre tan precisa !

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