El pez muere por la boca

El pez muere por la Boca

Por todos es bien conocido mi debilidad por la comida de hecho mi curvilíneo cuerpo me delata a simple vista, la experiencia de comer o degustar platos de diversa índole son para mí un placer extremo, reconozco que el exceso en este tema puede ser perjudicial para la salud pero cada quien elige sus batallas.

Guayaquil (Ecuador), me permite vivir en el pecado no existe una calle o esquina en donde los colores y olores no te inviten a probar todo tipo de alimentos deliciosos.

He tenido la fortuna de ser visitante de diversas ciudades en el mundo cosa que considero una bendición.

Mi Padre y Madre me brindaron esa oportunidad en mi infancia luego fue por cuenta propia por fortuna, pero eso no es lo que nos atañe en esta oportunidad.

Quiero hacerles sentir lo exquisito del arte culinario de mi ciudad anfitriona de turno la “Perla del pacífico”.

Guayaquil se abre al pacífico, es un puerto natural ancestral bordeada por el maravilloso río Guayas que desemboca en el Mar después 20 kilómetros de recorrido, rodeada de brazos de agua salobre y esteros interminables.

Esta misma ubicación geográfica la hace merecedora de una importancia como tal en la región Sur Americana, tiene una población aproximada de 2.655.685 almas que la convierte en la ciudad más grande del Ecuador y su capital económica.

Dicho esto vamos al tema.

Yo llegue al Ecuador por vía terrestre Como muchos de mis compatriotas Venezolanos pueden entender deguste todo lo que se me puso en mi camino, oh!! grata sorpresa todo me pareció exquisito.

En estas tierras el plátano es uno de sus productos bandera durante el año 2010 el Ecuador exportó 265 millones 587 mil 828 cajas de 18,14 kg, equivalentes aproximadamente a 4 millones 828 mil tonelada (según cifras oficiales).

Esto tiene como consecuencia que dicho producto esté intensamente ligado a la mesa de esta hermosa tierra, Maduro o Verde se le llama y todos los derivados de él son una delicia.

Los desayunos por estas tierras son suculentos y paso a describirle algunos.

Bolón de verde:

Se maja el plátano convirtiéndolo en una masa uniforme luego se hace bolas y se mezcla con chicharrón o queso.

Este plato en lo particular tiene una combinación de sabores exquisita y una carga energética insuperable.

Humitas:

Son pastelitos hechos con choclos tiernos, cebolla, ajo, huevos, queso y crema, se cocinan en las hojas de choclos al vapor.

Por Dios, son tan suaves que al ponerlas en tu boca sientes como que algo celestial cubriera por completo cada papila gustativa y el olor del maíz tierno impregna el ambiente envolviendo los sentidos.

Encebollado:

Un plato hecho a base de pescado, yuca y cebolla colorada encurtida.

Este plato es emblemático es hecho con un pescado llamado albacora que le da un sabor inigualable, no puedes decir que estuviste en Ecuador si no lo probaste.

Todo esto es de mañana así arranca el día entre el dinamismo diario de esta ciudad.

Esta urbe es excesivamente competitiva el pasado como puerto colonial por excelencia del pacífico, origino un crisol de razas que con el tiempo produjo una rica mixtura.

Ya para el almuerzo la cosa se pone seria debo confesarles que no soy de frecuentar establecimientos de alta cocina a esta hora meridiana, pues el tiempo que tengo para este menester es limitado frecuento las calles, los rincones de la ciudad, las “huecas”, para mi son lugares excitantes por el hecho del contacto con lo más sincero del pueblo “Guayaco”.

Estos lugares nutren mi mente de vivencias y anécdotas cosa que no pierdo oportunidad en disfrutar.

Los almuerzo son muy diversos y ricos en sustancia entre los más comunes y disfrutados están.

Cebiche de camarón:

Este plato está hecho a base de Camarón tomate, cebollas, pimentón, jugo de naranja, salsa de tomate, limón y pimienta.

Como ustedes pueden imaginar es un verdadero manjar seria muy fácil escribir dos tomos de 1000 páginas en describir el efecto que este plato puede causar al gusto.

Secos:

Estos pueden ser de diferentes animales de corral, pato, pollo, res, chivo, búfalo y en casos muy especiales con venado.

Este plato se realiza con tomate, cebollas, pimentón, Hierbas, naranjillas, achote y en ocasiones cerveza su tiempo de ejecución varia dependiendo el cárnico de turno puede variar entre 1 y 2 horas.

Esta amabilidad de la gastronomía es el más común de los platillos servidos para la hora del almuerzo por su diversidad y contenido.

Todo esto acompañado por diferentes contornos en especial el arroz y la menestra.

En definitiva Guayaquil es un portal a la lujuria alimenticia es un paraíso para el gusto, vivir en esta húmedas tierras llenas de contrastes es un placer para las sensaciones, nada aquí es planificado ni se basa en un urbanismo definido todo este conjunto de matices hacen de Guayaquil una ciudad digna de vivirla.